La nostalgia inevitable de despedir a un virtuoso se sintió en la última pelea del gran Floyd Mayweather Jr.
Ganando por decisión unánime en 12 round al Haitiano Andre Berto (un rival a la altura de las circunstancias) se retiró del deporte de los puños siendo el mejor.
Se mostró con toda su esencia a lo largo de todos los asaltos, luciéndose en el último round, donde atacó de contragolpe con la extrema velocidad y destreza que lo caracterizaron; a tal punto que incluso «bailó» (literal y metafóricamente) arriba del cuadrilátero.
La superioridad la marcaron las tarjetas de los jurados con 117-111, 118-110 y 120-108, dándole claramente el triunfo al 5 veces campeón del mundo, ahora ex boxeador.
Cosechó, en 19 años de profesionalismo, tantas criticas como elogios. Fue querido por muchos y odiado por unos cuantos más pero, lo más importante, en lo que a carrera deportiva se refiere se lleva 49 victorias y ninguna derrota igualando el récord de Rocky Marciano.
A sus 38 años le dijo adiós al pugilismo sentenciando lo que afirman las estadísticas pero muchos siguen poniendo en duda: » El de esta noche fue mi último combate y, como siempre, ganó el mejor. Soy el mejor, claro. El mejor de todos».